Esta vida es una camino que debemos recorrer, nosotros estamos de paso, pero he decidido que estoy cansado de pasar por la vida sin hacerme notar, sin que nadie me vea, sin que descubran que estoy aquí.
Todos hablan del destino, pues yo no creo en él, el destino es una excusa de los jóvenes para no moverse en la vida y buscarse su fortuna, dejan pasar el tiempo esperando que algo les caiga del cielo, el problema es que los hay con suerte y les cae sin moverse, pero no son muchos.
Yo soy el dueño de mi vida, el creador de mis sueños, de mis ilusiones, y de mi camino. Camino que recorro solo, camino en el que yo elijo quien quiero que me acompañe en cada etapa.
Acabo de empezar mi camino, solo llevo un tramo pequeño y mas de una vez he querido rendirme, quedarme tendido en el suelo y no levantarme , no separarme de la piedra que me tiró al frío suelo.
Pero ese frío me hizo abrir los ojos y ver la realidad tal y como era.
Encontraba mil motivos para quedarme en el suelo pero encontré mil y un motivos para levantarme y seguir. Ese siempre ha sido mi impulso eléctrico, mi motivación ha sido la de ver las cosas mejor de lo que estaban y hacer que se cumplieran, aunque a veces era difícil pero siempre se sale de todo, con voluntad y ayuda extra.
Ahora he retomado el camino, creía haber olvidado la senda correcta, pero no lo he hecho, iré donde mis pies me lleven y donde me dicte el tiempo.
Tengo un pensamiento en mi cabeza que la verdad es que lo veo como teoría básica de la vida.
Alea jacta est. La suerte está echada.
Esta frase la puedes interpretar como parte de un destino pero yo lo veo de otra manera.
Yo pienso que nacemos con estrella y que eso se fundamenta en si somos personas con suerte o no.
Yo creo que nací con estrella, una estrella que me protege aunque a veces se aleje de mi.
Mi estrella me protege de todo mal pero soy yo quien decide por donde camina.
Siempre tenemos elección, no lo olvideis.
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